Cletear:
1) Acc. Dícese de quién logra un bien, cargo o posición mediante trucos y/o artilugios, forzando reglamentos o leyes.
2) Acc. Dícese de quién, abusando de la buena voluntad y la confianza de sus socios, traiciona una idea, valor o ideología.
Un neologismo clásico, del año 0 DC (Después de Cleto).
El último acto de la Resolución 125, impulsada por Martín Lusteau y todo el gabinete Kirchnerista, fue coronado por la mítica afirmación en negación de Julio César Cleto Cobos:
Mi voto no es positivo.
En ese mágico momento las redacciones de los diarios ardieron en busca de adjetivos para calificar al primer Vicepresidente opositor de la historia argentina. Barajaron algunos neologismos de moda. Borocotizarse salía a flor de teclado, pero era muy poco para Tremendo Acto Democrático. Burlando el espíritu de la Constitución Nacional, que pone un representante del Poder Ejecutivo a presidir el Senado y le da cómo atribución el voto de desempate (para que el poder ejecutivo desempate en el Senado), Cleto votó en contra de su propio Poder Ejecutivo.
Borocotizarse era muy poco, refería a un diputado que siendo elegido por un partido, decidía representar a otro (Cómo Bonasso, Felipe Solá, Graciela "esposadebarrionuevo" Caamaño y un largo etcétera), algo vulgar.
Afortunadamente, nuestro pueblo no olvida y lo recuerda cariñosamente con el neologismo
cletear.